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OFICINAS RISCO

  • Arquitectura: Andrés Casares + CF taller + MM Arquitectos
  • Ubicación: Los Alpes, Álvaro Obregón, CDMX
  • Superficie construida: 475 m2
  • Año: 2021
  • Colaboradores: Paola Azócar, Ricardo García
  • Iluminación: ILWT
  • Alfombra: Interface
  • Mobiliario: Herman Miller, Haworth, Organitec
  • Fotografía: LGM Studio

RISCO seguros · fianzas · actuaría surge a partir de la fusión de dos empresas que suman su experiencia, talento e ideas para formar una empresa mucho más fuerte y consolidada en el medio.

No solo se combinaron dos organizaciones, sino también dos generaciones; por un lado, los socios senior aportan la experiencia de un largo camino recorrido en el medio y generan confianza en la marca. Por el otro, los socios junior traen ideas frescas a la mesa, un nuevo empuje y ganas de crecer junto con el negocio.

Lograr que dos generaciones convivan y trabajen dentro de un mismo espacio de trabajo, con culturas y hábitos tan distintos, puede ser algo complejo. Nuestra tarea y mayor reto fue logar un espacio abierto y sin divisiones, donde el flujo del trabajo fuera inclusivo y transparente.

La prioridad en todo momento fue privilegiar la entrada de luz natural para la mayoría de los trabajadores y espacios, logrando una sensación de amplitud necesaria, ya que existe una alta densidad de usuarios por metro cuadrado.

Con esto en mente se definió la ubicación de los privados, salas de juntas, comedor y áreas de servicios, aprovechando los muros estructurales de concreto del edificio y dejando las fachadas libres en su totalidad.

Las oficinas están compuestas por dos alas; la principal contiene las estaciones de trabajo y las oficinas de los socios junior, mientras que la segunda alberga las oficinas de los socios senior. Éstas están unidas por un nodo con diferentes áreas de servicio, como los baños, el archivo de alta densidad y la zona de impresión.

Cuentan con dos accesos; el principal, con una recepción en mármol calacatta, y una secundaria exclusiva para los socios senior, que es atendida por una asistente general. Es poco común que la oficina reciba clientes, por lo que solo cuenta con una sala de juntas privada. Además, cada oficina de socios junior tiene una pequeña mesa para reuniones internas que se utilizan entre las cabezas de las áreas y sus colaboradores.

El comedor se esconde detrás de una rejilla Irving con espejo reflectante a una sola cara, el cual permite camuflajear esta área social, pero al mismo tiempo darle luz natural y vista al resto de la oficina. La rejilla se desdobla sobre un plafón que enfatiza la circulación principal de la oficina.

Adicional a todo esto, el ala principal cuenta con una sala de juntas abierta para los socios junior y cuatro puestos semiprivados para los socios comerciales que acuden a las oficinas de forma esporádica.

Las oficinas manejan tonos sobrios y neutros con algunos toques en azul, tanto en la alfombra modular como en el mobiliario. La madera de encino utilizada en los plafones y los lambrines de perfocel en tono obscuro fueron seleccionados por temas acústicos, calidez y luz para el área abierta. Los muros de concreto del edificio se dejaron aparentes.

Al tratarse de la fusión de dos empresas, la imagen gráfica se transformó por completo; a partir de la paleta de colores resultante, se decidió resaltar la rejilla Irving Roja como el elemento acento o parte protagónica de la oficina.

La forma irregular del partido arquitectónico del edificio representó un reto significante, ya que fue necesario adaptar un espacio que estaba concebido para cuatro corporativos separados en uno solo, con una planta irregular y una densidad de ocupantes por metro cuadrado muy alta.

Además de las dificultades planteadas y la pandemia, que se atravesó para poner sus propias complicaciones en la entrega del proyecto, la partida inesperada de nuestro gran amigo y socio colaborador Andrés a la mitad fue un reto importante. Todo esto nos impulsó a reinventarnos para salir adelante y lograr terminar.